Mis manos de hielo
Ahora vuelves a tener los ojos
empañados por no quererme
por no haberte dejado quererme
atando de cadenas brazos
tu cintura, cuando yo estaba.
Ya no me dices, ven
a alegrarme el día.
Ya no llegan los vientos del Norte
ni susurran tus labios, que no me llaman
ni piden mi regreso.
Ahora ya no viene el viento de tu aliento
sino del Levante y tengo frío.
Llega el aire congelado
a tapar mis manos de hielo.
Una cuna vacía llora la falta
de la niña que dormía.
Te busco entre los libros
que leiste, para encontrarme contigo,
Te busco entre los folios
que escribí para encontrarnos.
Siempre hay un "pero"
lleno de puntos suspensivos
capaces de vaciar todo
lo que dijiste antes.
Pero sé
Que el fondo de tus ojos
también me busca.
empañados por no quererme
por no haberte dejado quererme
atando de cadenas brazos
tu cintura, cuando yo estaba.
Ya no me dices, ven
a alegrarme el día.
Ya no llegan los vientos del Norte
ni susurran tus labios, que no me llaman
ni piden mi regreso.
Ahora ya no viene el viento de tu aliento
sino del Levante y tengo frío.
Llega el aire congelado
a tapar mis manos de hielo.
Una cuna vacía llora la falta
de la niña que dormía.
Te busco entre los libros
que leiste, para encontrarme contigo,
Te busco entre los folios
que escribí para encontrarnos.
Siempre hay un "pero"
lleno de puntos suspensivos
capaces de vaciar todo
lo que dijiste antes.
Pero sé
Que el fondo de tus ojos
también me busca.
2 comentarios
Cerro -
pero..........
un poema precioso.
Abrazos.
MalSapo -